Cerramiento para convertir una terraza en una habitación
La clave de los cerramientos es que permiten transformar cualquier espacio abierto en uno cubierto para darle una nueva vida. De este modo puedes reorganizar tu vivienda y disfrutar de más espacio útil donde antes no lo había. Es el caso de utilizar un cerramiento para convertir una terraza en una habitación. Así conseguirás un extra de versatilidad en un tu hogar y, lo mejor de todo, más espacio habitable. A lo largo de este artículo te contaremos todas las claves para que sepas cuáles son los mejores cerramientos, los pasos que es mejor seguir y los aspectos legales que hay que tener en cuenta.
Ventajas de convertir tu terraza en una habitación
Antes de empezar, veamos por qué convertir tu terraza en una habitación más para la casa es una gran idea. Estas son las principales ventajas:
- Aumento del espacio habitable y versatilidad: Por supuesto, la razón principal es que ganas más metros cuadrados útiles en tu propiedad que se pueden utilizar para instalar a una persona más. Esto es fantástico si sois muchos en la casa o si quieres sacarle mayor rentabilidad a un alquiler por habitaciones. No obstante, hay más. Una habitación puede tener muchos usos. Puede ser un despacho, un gimnasio, una sala de estar, una sala de juegos, un espacio de meditación o lectura, etc. Por no hablar de la opción de combinar varias de estas opciones con muebles modulares. En definitiva, también ganarás mucho en versatilidad.
- Uso durante todo el año: Lógicamente, al cerrar la terraza y darle un nuevo uso esta estará protegida de los agentes externos. Gracias a ello podrás utilizarla durante todo el año sin limitaciones.
- Incremento en el valor de la propiedad: Si conoces la normativa, sabrás que las terrazas cubiertas que no superen el 15% de la extensión de la propiedad se tasan al 50% respecto al valor del metro cuadrado de tu vivienda. Es decir, si vendes una casa a 1000€ por metro cuadrado, los metros de la terraza se tasarán a 500€. No obstante, se trata de una formalidad, pues en ello debe tenerse en cuenta la calidad del cerramiento y el acabado final. Al fin y al cabo, no es lo mismo comprar una casa recién reformada que una antigua. En este sentido, podrás vender por un precio muy superior. Para que te hagas una idea, una reforma incrementa el valor de ese espacio hasta en un 30%.
- Ahorro energético: Sin tener en cuenta la habitación cerrada, que será la nueva barrera exterior de la vivienda, el resto de la casa ganará en aclimatación. Esto supone un gran ahorro energético ya que te resultará mucho más fácil mantener la temperatura en las estancias interiores. Al final de cada mes notarás como tu factura energética se ve reducida.
- Aislamiento acústico: En el otro lado de la balanza se encuentra la factura del confort. Gracias a un cerramiento, las zonas interiores y colindantes a este estarán mucho más protegidas de la contaminación acústica tan presente en el día a día.
Consideraciones Clave antes de Empezar
Ahora que ya conoces todos los beneficios de transformar una terraza en una habitación, cabe destacar algunos puntos clave que hay que tener en cuenta antes de empezar:
- El clima local: Dependiendo del clima de tu zona deberás optar por un tipo de cerramiento u otro. En este sentido, el material es lo que más influye. Por ejemplo, en zonas frías es mejor optar por aislamientos más efectivos, mientras que en zonas cálidas hay que apostar por opciones que permitan una mejor ventilación y refrigeración.
- La orientación de la terraza: Otro elemento relevante es hacia dónde está orientada la terraza. Si es sur, será más cálida, mientras que si es norte será más fría. Tenlo en cuenta junto con tu clima local la importancia de la orientación al instalar un cerramiento de terraza.
- La estructura existente: La integridad estructural de tu edificio debe ser un aspecto principal a tener en cuenta. El cerramiento debe respetar esto, pues, de otro modo, podría venirse abajo generando un grave riesgo para ti y tus vecinos. Es por ello que debes instalar un cerramiento que la estructura pueda soportar. En este sentido, viene muy bien aprovechar estructuras que ya existen. Por ejemplo, es más fácil cerrar una terraza que ya cuenta con tres paredes y techo que una que no tiene nada.
- Los objetivos de uso del espacio: Una habitación es un espacio sencillo, pero imagina que quisieras convertirla en un almacén. Esto podría suponer demasiado peso en la estructura y podría no ser la mejor idea. Otro ejemplo es que pusieses un huerto urbano en esa habitación, en ese caso la orientación sería un aspecto clave. Analiza que uso le vas a dar al espacio para determinar si es el más adecuado.
- La comunidad de vecinos: Una limitación que suele aparecer con frecuencia es la contraria de los vecinos a permitir determinadas modificaciones en un inmueble. Si perteneces a una comunidad, asegúrate antes de confirmar con los demás propietarios que están de acuerdo con tu reforma.
- La normativa municipal: Por último, también debes informarte sobre la legalidad de hacer un cerramiento en tu localidad. Ten en cuenta que los aspectos normativos varían de un lugar a otro según lo decida su ayuntamiento. Por ese motivo, debes acudir allí para consultar cuáles son las opciones que están permitidas y qué requisitos son necesarios.



Opciones de cerramiento para terrazas
Una vez que tienes en cuenta todos los factores, debes decidir qué tipo de cerramiento quieres poner. En este sentido, la división suele hacerse según los materiales a utilizar:
- Vidrio: Se trata de los cerramientos más estéticos y los más aceptados en la mayoría de normativas municipales y comunitarias. Esto lo convierte en la opción predilecta para muchos. Si bien puede parecer que ofrece limitaciones en cuanto a la privacidad, existen cristales especiales que permiten ver desde el interior y no ser vistos desde el exterior. No obstante, su mayor limitación es que se trata del cerramiento que menor grado de aislamiento térmico y acústico ofrece en comparación con el resto.
- PVC: Suelen combinarse con el vidrio y el resultado es más que satisfactorio. Por ejemplo, el marco de la mayoría de ventanas en la construcción actual se realiza en este material. Es económico y ofrece la posibilidad de instalarse en todo tipo de acabados. Según el nivel de complejidad, se puede combinar con capas aislantes que mejoran la aclimatación y reducen el ruido. Sin embargo, esta una alternativa inusual que encarece notablemente el proyecto, existiendo otras opciones que cumplen la misma función de forma más económica.
- Panel-sandwich: Se trata de paneles prefabricados que combinan diferentes capas de materiales. Las exteriores son más estéticas y existen infinitas opciones de personalización. Por ejemplo, puedes optar por un aspecto pulido imitando al metal, una imitación de ladrillo, de madera, etc. En las capas interiores se utilizan aislantes acústicos y térmicos que favorecen la eficiencia energética y el confort. Lo mejor es que se pueden añadir más capas, como una protección impermeable, contra incendios, etc. Si bien no son tan económicos como otras opciones, pero entran en el reino de lo asequible.
- Aluminio: Son la opción más asequible de todas y, por ende, la que menos ventajas ofrece. Eso sí, a nivel estético se puede personalizar casi tanto como el panel-sandwich. No obstante, es muy susceptible a la temperatura y a las vibraciones del ruido. Son una buena opción para estancias orientadas al norte en localidades del sur. Así no reciben sol directo, optimizando su capacidad energética. La mayor ventaja que tienen es lo poco que pesan, siendo posible instalarlas en prácticamente cualquier estructura sin comprometerla.
- Madera: Es una de las opciones más exclusivas debido a su precio y a que requieren manufactura. Este tipo de cerramiento aporta un buen grado de aislamiento y, además, resulta muy agradable gracias al acabo orgánico que tiene. Su mayor contra es que requiere de un mayor mantenimiento que el resto de opciones y tiene menor durabilidad. Mientras que otras opciones pueden durar hasta 50 años sin requerir reparaciones o tratamientos, los cerramientos de madera deben cuidarse anualmente y tienen una vida útil media de unos 30 años.
- De obra: Es, sin duda, la opción más cara y la más engorrosa. Para empezar, porque a diferencia del resto de cerramientos, tendrás que hacer una obra. Ten en cuenta que la mayoría de cerramientos están pensados y diseñados para ser instalados. Por el contrario, los de obra deben ser construidos. Esto también implica solicitar permisos, analizar la estructura del edificio, etc. Lo bueno es que aportan el mayor nivel de confort y aislamiento.
Aspectos legales y permisos
Como ya hemos comentado en los aspectos a tener en cuenta, el apartado legal y los permisos necesarios es un punto clave a la hora de poner cerramientos. En este sentido debes tener en cuenta:
- La normativa de tu comunidad de vecinos: Cada comunidad de vecinos regula las modificaciones que se pueden hacer sobre la fachada de la propiedad. Además, en la mayoría de casos las terrazas se consideran un espacio público de uso privativo. Es decir, tienes libertad de utilizar el espacio como quieras pero la comunidad tiene la última palabra en cuanto a modificaciones de gran calado. Infórmate bien en las bases de tu comunidad y, si fuese necesario, solicita que tu cerramiento sea un tema a tratar en la junta vecinal para obtener el permiso de los vecinos si así lo estipula la normativa.
- Las estipulaciones legales de tu ayuntamiento: Cada ayuntamiento establece su propia normativa municipal para determinar qué se puede y qué no se puede instalar en cuanto a cerramientos. Algunas localidades son laxas y permisivas mientras que otras ponen muchas trabas y limitaciones. Acude a tu ayuntamiento para obtener toda la información al respecto, de modo que tu cerramiento sea legal y seguro.
- El permiso de obra si fuese necesarios: Aunque la mayoría de cerramientos se colocan fácilmente, algunos requieren pequeñas modificaciones que suponen hacer obras. Si el cerramiento es de obra, también deberás tenerlo en cuenta para solicitar los permisos necesarios.
Diseño y estética
Una vez superadas todas estas cuestiones, lo óptimo es que tu cerramiento encaje con el diseño y la estética de tu propiedad, de modo que se complementen. En este sentido, es recomendable tener en cuenta:
- La fachada exterior: Si vives en una comunidad de vecinos este punto vendrá dado por la normativa comunitaria. Por el contrario, si se trata de una vivienda totalmente tuya, tendrás más libertad. Sea como fuere, siempre hay opciones de personalización. Analiza cómo se percibe la vivienda desde el exterior para elegir un cerramiento que sume al estilo actual. De otro modo, estarías creando una mezcla de estilos que con el tiempo podría cansarte y disgustarte.
- El estilo de tu vivienda: tan importante es el exterior como lo es el interior. También deberás valorar cómo has decorado tu casa y qué estilo predomina para que encaje a las mil maravillas con el nuevo cerramiento.
Para que te resulte más fácil elegir, ten en cuenta que el vidrio es la opción más elegante, moderna, luminosa y sofisticada.
El PVC, el aluminio y el panel-sandwich, aunque más artificiales, ofrecen muchísimas opciones de personalización que pueden encajar con casi cualquier estilo. Por ejemplo, puedes instalar un panelado moderno y único o poner PVC con imitación pizarra, perfecto para viviendas en el norte.
La madera es la vertiente más orgánica y acogedora de todos los cerramientos. Ofrece un acabo que puede ser desde muy clásico hasta muy moderno, sobre todo si se combina con vidrio.
Por último, los cerramientos de obra se plantean para que formen parte de la construcción existente como si nunca se hubiese hecho un cerramiento.
Cómo elegir una empresa adecuada y obtener la mejor relación precio calidad
Ahora que ya tienes todo claro, solo queda elegir quien te ponga el cerramiento para transformar tu terraza en una habitación. En este sentido, es recomendable optar siempre por fabricantes antes que por proveedores, ya que suelen ofrecer mejores precios y conocen mejor su producto. Ahora bien, siempre hay excepciones de proveedores especializados.
Otro punto clave es el trato con el cliente y las reseñas que reciben estas empresas. Analiza las opiniones que deja la gente en Internet, procura buscar proyectos realizados por estas empresas y valora cuáles reciben las mejores impresiones.
Sea como fuere, en PrecioCerramientos nos especializamos en encontrar a estas empresas por ti. Basta con que nos cuentes qué tipo de cerramiento quieres en tu terraza y nosotros nos encargaremos de contactar con las mejores empresas de tu localidad. Así, en cuestión de horas, recibirás varios presupuestos para que puedas comparar y elegir fácilmente ahorrándote la tediosa búsqueda previa. Además, puedes hacerlo sin ningún tipo de compromiso, de modo que la comodidad está garantizada.
En definitiva, disfrutar de una habitación extra en casa siempre es una gran adición a cualquier hogar que te resultará en mayor comodidad, más espacio y mejor confort a muy corto plazo. Hacerlo es fácil si sabes como y nosotros podemos ayudarte con ello ¿a qué esperas?