Cómo solicitar los permisos necesarios para instalar una pérgola
Instalar una pérgola puede transformar un espacio exterior, pero es importante conocer y seguir el proceso adecuado para solicitar permisos. Anteriormente hemos hablado de permisos necesarios para instalar una pérgola. Obtener las licencias necesarias garantiza que la instalación cumpla con las normativas locales. Además, evita sanciones y asegura que no haya problemas legales a futuro. Para que te resulte más fácil, en este artículo te explicamos paso a paso cómo solicitar todos los permisos que hacen falta, desde la documentación requerida hasta la presentación y los posibles costes asociados
¿Qué pérgolas necesitan permisos?
Antes de empezar, hay que destacar que la mayoría de pérgolas no requieren permisos especiales. Eso si, todas las pérgolas, sin importar del tipo que sean, exigen como mínimo:
- El permiso de la comunidad de vecinos: para garantizar que no existen problemas con tu urbanización, lo mejor es que solicites a la gestión de fincas que te informen sobre la regulación que tiene tu comunidad sobre las pérgolas. Si hay libertad para ponerlas, no tendrás que preocuparte por este punto. Sin embargo, si hay limitaciones, deberás solicitar el permiso para continuar adelante en la próxima junta de vecinos. En este sentido, debes tener en cuenta que es posible que te impongan algunas directrices estéticas para que la pérgola sea acorde al estilo de la urbanización.
Una vez que dispongas del permiso, debes valorar el tipo de pérgola que vas a poner. Las opciones, a grandes rasgos, son:
- Temporales.
- De instalación.
- De obra.
Pérgolas temporales
Son las más económicas, las consideradas “de quita y pon”, que suelen venderse en grandes superficies. Constan de una estructura que puede ser desde aluminio hasta madera y que se monta y desmonta con mucha facilidad. Tanta, que lo normal es que tú te encargues de la instalación. La cubierta suele ser de lona o plástico. Dadas sus características, estas pérgolas solo requieren el permiso de la comunidad y, en raras ocasiones, el permiso del ayuntamiento si vives en una zona protegida por Patrimonio.
Pérgolas de instalación
Son las más comunes y constan de una estructura fija que, una vez instalada ya no se quita.
La cubierta puede ser abierta, con tablones de madera, o cerrada, con telas, vidrio, plástico, aluminio, madera, etc. Lo importante es que no requieren hacer obras para instalarlas o, en caso de ser necesario, se trata de obras muy menores para facilitar su colocación. De nuevo, al no haber obras, solo requieren el permiso de la comunidad.
Pérgolas de obra
Son las más selectas, ya sea porque son de diseño único y personalizado o bioclimáticas. Al requerir obra necesitarás el permiso de la comunidad en cualquier caso y los permisos correspondientes del ayuntamiento.
Documentación necesaria para solicitar los permisos
Para solicitar permisos de instalación, las autoridades locales exigen ciertos documentos que detallan el proyecto. A continuación, te explicamos cuáles son los principales documentos que deberás presentar ante el ayuntamiento:
- Planos: Se trata del apartado más importante de la obra. Los planos deben mostrar la ubicación exacta donde se instalará la estructura, así como sus dimensiones y detalles sobre los materiales que se usarán.
- Descripción del proyecto: debe incluir información sobre la altura, el tipo de anclaje y otros detalles técnicos que permitan a las autoridades evaluar si cumple con la normativa local. Puedes consultar con un arquitecto o un profesional del sector para asegurarte de que los planos están bien elaborados y cumplen con los requisitos necesarios, aunque lo lógico es que quien haya preparado el proyecto ya tenga en mente todas estas regulaciones.
- Informe técnico: En algunos casos, sobre todo si la pérgola está fijada permanentemente a la estructura de la vivienda o si está destinada a soportar un peso considerable, puede ser necesario un informe técnico. Este informe debe estar firmado por un arquitecto o ingeniero que certifique que el diseño es seguro y cumple con las normativas vigentes. Aunque no siempre es obligatorio, tener un informe técnico puede agilizar la aprobación del proyecto y demostrar que la instalación se realizará de forma segura.



Cómo presentar la solicitud de permisos para instalar una pérgola
Una vez que tengas la documentación necesaria, el siguiente paso es presentar la solicitud. Este proceso puede variar ligeramente dependiendo del tipo de propiedad y la normativa local, pero en general, los pasos son los siguientes:
- Dónde presentar la solicitud: La mayoría de las solicitudes se presentan en el ayuntamiento correspondiente a la localidad donde se va a realizar la instalación. En muchos casos, especialmente en propiedades compartidas como edificios de apartamentos, es posible que también se requiera presentar la solicitud ante la comunidad de propietarios. Como ya hemos comentado, puedes adelantarte consultando este punto con tu asesor de fincas.
- Proceso de solicitud en el ayuntamiento: Antes de presentar la solicitud, verifica los requisitos en el departamento de urbanismo del ayuntamiento, ya que pueden variar según la ubicación. En general, el proceso incluye:
- Solicitar cita previa: Es posible que necesites programar una cita para presentar la solicitud en persona. Algunos ayuntamientos también permiten la presentación online.
- Presentar la documentación: Lleva contigo todos los documentos necesarios, incluyendo los planos, la descripción del proyecto y, si aplica, el informe técnico.
- Pagar las tasas administrativas: En el momento de presentar la solicitud, se te pedirá que abones una tasa que cubre el coste de la tramitación. La cuantía puede variar, así que es recomendable consultar el importe exacto de las tasas antes de acudir.
- Esperar la resolución: una vez hayas realizado los pagos, deberás esperar un plazo que dependerá de la disponibilidad del ayuntamiento para que te confirmen si puedes, o no, instalar la pérgola.
Costes asociados a la solicitud de permisos
Solicitar permisos puede tener algunos costos adicionales. Es importante tener una idea clara de estos gastos para evitar sorpresas durante el proceso. Aquí tienes un desglose de los costos más comunes:
- Tasas municipales: La mayoría de los ayuntamientos aplican tasas administrativas para la tramitación de permisos de construcción o instalación. Estas tasas pueden variar, desde alrededor de 50 a 200 euros, dependiendo de la localidad y de si el permiso es para una obra menor o mayor. Es recomendable verificar el coste exacto en el ayuntamiento para asegurarte de que cumples con todos los requisitos.
- Honorarios de profesionales: Si has contratado a un arquitecto o ingeniero para elaborar los planos o el informe técnico, tendrás que considerar el costo de sus servicios. Los honorarios profesionales pueden variar según la complejidad del proyecto, pero suelen oscilar entre 200 y 600 euros. Consultar a un profesional también puede ayudarte a garantizar que el proyecto cumple con todas las normativas.
Plazos y aprobación de la solicitud
Es útil tener en cuenta los tiempos de tramitación para planificar adecuadamente el inicio de tu proyecto. Aunque estos plazos pueden variar, aquí te ofrecemos una idea general de lo que puedes esperar:
- Tiempo de tramitación: Dependiendo del ayuntamiento y la época del año, el tiempo de espera para obtener la aprobación del permiso puede variar entre una y tres semanas. Si se requiere una revisión más exhaustiva, como en el caso de una licencia de obra mayor, el plazo podría ser de hasta dos meses. Ten en cuenta que son plazos orientativos y que, en la práctica, podrían extenderse durante mucho más tiempo si el ayuntamiento tiene una gran sobrecarga de trabajo.
- Seguimiento de la solicitud: En algunos casos, puedes hacer un seguimiento del estado de tu solicitud directamente a través del portal web del ayuntamiento o llamando a la oficina de urbanismo. Si detectas que tu solicitud se está retrasando, es recomendable contactar con el ayuntamiento para verificar si hay algún documento pendiente o alguna cuestión adicional que resolver.
Solicitar los permisos necesarios para instalar una pérgola de obra es un paso esencial para asegurar que el proyecto se ejecute de manera legal y sin inconvenientes. Aunque el proceso puede parecer tedioso, seguir los pasos adecuados y presentar toda la documentación requerida te permitirá obtener la autorización de forma eficiente. Investiga siempre las normativas locales y, si tienes dudas, considera la opción de contratar a un profesional para que te asesore en todo el proceso.